miércoles, 20 de octubre de 2004

COPA DAVIS: UNA SABIA DECISIÓN

Si algo desea la Real Federación Española de Tenis (RFET) es ganar la Copa Davis. Esta asignatura pendiente del tenis español hasta el año 2000, es la que todos quieren aprobar a toda costa y muy pocos lo han conseguido. Ahora se plantea la elección de la pista donde jugar como algo político y electoral, cuando lo que realmente importa es lo deportivo, o al menos eso pensamos la gente de a pie.

La elección de Sevilla ha sido algo lógico y esperado. Para quien no lo sepa, que seguramente será la mayoría, el jugar a nivel del mar o en altura establece una diferencia de rendimiento espectacular entre jugadores. La pelota con que se juega al tenis es un objeto que no pesa más allá de los 57 gramos y en el ambiente de máxima presión atmosférica (0 metros sobre el nivel del mar) corre relativamente despacio cuando atraviesa el aire. Se dice habitualmente que “pesa” más.

Esto, que parece una excusa de cara a logros extradeportivos, es la pura realidad y aquellos que hemos jugado a cierto nivel lo hemos sufrido. Exagerando los límites, no es igual jugar en Bogotá, a 2.640 metros, que hacerlo en Málaga. Y tampoco es igual competir a 650 metros (Madrid) que a 6 (Sevilla). En la capital la pelota “vuela” y en Sevilla se acusa una enorme lentitud que en días húmedos se convierte en algo desesperante. Hay que evitar como sea que los americanos hagan estragos con sus saques y su agresividad natural. Andy Roddick, en la semifinal contra Bielorrusia, batió el record de la historia con un saque a ¡249,4 km/h! ante Voltchkov.

Los técnicos del equipo español tienen muy claro lo que quieren. Los jugadores son, en los últimos años, respetados a la hora de elegir sede. Y los americanos se mueren por jugar en altura. Todo perfecto para tomar, en décimas de segundo, una sabia decisión.

Uno piensa que Agustín Pujol, presidente de la RFET, se ha visto beneficiado electoralmente con la designación de Sevilla, pues los votos de una Comunidad agradecida y tan grande como Andalucía pueden ser decisivos a la hora de renovar o no el cargo en las urnas. Si el 29 de Enero gana las elecciones a Presidente de la RFET, podremos hablar, entre otras cosas, de la suerte del campeón.



Josemari Sexmilo
Entrenador Nacional de Tenis
20 de Octubre de 2004
Publicado en Diario de Noticias (23.OCT.2004)